Si alguna vez has sentido que usar tu ordenador debería ser una experiencia estética, fluida y sin complicaciones, es muy probable que te termines cruzando con elementary OS. Esta distribución de Linux ha ganado popularidad por ser una alternativa ligera, hermosa y eficiente, especialmente pensada para quienes vienen de entornos como macOS o Windows y buscan dar el salto a algo más libre, más rápido y con menos dolores de cabeza.
Basado en Ubuntu, elementary OS ofrece todo el poder de una distro Linux robusta, pero con una interfaz que brilla por su simplicidad. Se le ha llegado a llamar “el macOS de Linux”, y no es solo por su apariencia: el enfoque en el diseño, la experiencia de usuario y la coherencia visual lo hace destacar.
Personalmente, descubrí elementary OS cuando me enfrenté al dilema de elegir un sistema operativo para trabajar en mi doctorado. No era solo cuestión de rendimiento, sino de sensaciones: necesitaba algo estable, rápido y, sobre todo, que no interfiriera en mi flujo de trabajo.
Elegancia minimalista: La interfaz Pantheon y su parecido con macOS
Uno de los mayores atractivos de elementary OS es su entorno de escritorio llamado Pantheon. Desde el primer arranque, la experiencia es coherente, elegante y pulida. Los bordes suaves, la barra superior estilo macOS, el dock inferior limpio y aplicaciones que siguen las mismas guías de estilo… todo contribuye a una sensación de producto bien terminado.
Lo más sorprendente es que esto se logra sin consumir recursos excesivos. Incluso con efectos visuales, el sistema se mantiene ágil. A diferencia de entornos como GNOME o KDE, que pueden llegar a ser pesados si no se ajustan, Pantheon es ligero por defecto y extremadamente usable.
Lo noté enseguida en el Dell que me prestó la universidad. Pese a que es un portátil bastante potente (i7 de 11ª generación, 32GB de RAM), quería asegurarme de tener un sistema que no desperdiciara ese poder en animaciones inútiles. Elementary OS entregó justo eso.
Elementary OS vs Ubuntu vs Windows: ¿cuál elegir realmente?
Cuando se trata de tomar decisiones entre sistemas operativos, especialmente si tu equipo viene “preconfigurado” por una institución o empresa, las opciones parecen estar escritas en piedra: o usas lo que te dan, o luchas contra corriente. En mi caso, la universidad ofrecía solo dos opciones: Windows 10 o Ubuntu.
Aunque soy plenamente consciente de que Windows tiene herramientas muy desarrolladas, ya no me apetecía volver a pelearme con actualizaciones automáticas, antivirus intrusivos o bloatware. Por otro lado, Ubuntu, aunque estable, no terminaba de convencerme a nivel visual ni de experiencia de usuario.
Y fue ahí donde entró elementary OS, un punto intermedio perfecto. Me quedé con una clave de activación de Windows “por si acaso”, pero nunca volví atrás. Este sistema se sintió, desde el primer día, como la decisión correcta para mi flujo de trabajo académico y personal.
Características clave de elementary OS que debes conocer
Más allá del diseño, elementary OS destaca por varias razones que lo convierten en una opción ideal para muchos perfiles:
- AppCenter: Una tienda de aplicaciones enfocada en software libre, con un modelo “paga lo que quieras”.
- Privacidad por defecto: Sin telemetría invasiva. No recolecta tus datos.
- Actualizaciones silenciosas: Nada de reinicios inesperados ni pantallas de espera eternas.
- Aplicaciones nativas: Navegador Epiphany, gestor de archivos Files, calendario, calculadora… todo con diseño coherente.
- Basado en Ubuntu LTS: Lo que garantiza compatibilidad con paquetes, estabilidad y acceso a miles de repositorios.
- Sistema liviano: Ideal para equipos con hardware modesto, aunque en mi caso lo usé en un portátil potente y lo exprimió al máximo.
Además, la documentación es clara, y la comunidad —aunque más pequeña que otras distros— es muy activa y apasionada.
Elegir Linux sobre Windows en un entorno académico
Después de comenzar mi doctorado en diciembre de 2021, la Universidad me proporcionó un portátil en febrero de 2022. El modelo específico es un Dell Latitude 5520 con una CPU i7 11th gen y 32GB de RAM DDR4. Desde el principio, hubiera preferido comprar un MacBook. Sin embargo, lamentablemente, nuestra Universidad tiene una afiliación especial con Dell, lo que limitó significativamente nuestras opciones.
Aparte del hardware, también se nos dio la oportunidad de elegir el sistema operativo. Similar a la dinámica de la política estadounidense, teníamos dos opciones: Windows o Linux. Para ser más precisos, tuve que decidir entre Windows 10 y Ubuntu. Aunque era consciente en ese momento de que no quería trabajar con Windows, todavía opté por que se presentara únicamente tener una clave de activación vinculada a mi hardware, por si acaso surge una circunstancia imprevista y necesito volver a Windows.
Finalmente, instalé elementary OS por mi cuenta. Fue una decisión estratégica, pero también emocional. Quería algo que funcionara, que no me distrajera y que me ayudara a concentrarme en lo importante. Hasta el día de hoy, no me arrepiento.
¿Elementary OS es bueno para trabajar y estudiar? (Spoiler: sí, y te cuento por qué)
Como usuario académico, paso buena parte de mi tiempo usando herramientas como VS Code, LaTeX, Zotero, navegadores con múltiples pestañas abiertas, y herramientas de análisis como Jupyter Notebooks o RStudio. Elementary OS se ha comportado de forma impecable con todas ellas.
No solo eso, sino que las distracciones visuales desaparecen. El diseño limpio, la ausencia de notificaciones molestas, la velocidad de respuesta… todo contribuye a crear un entorno enfocado y silencioso. Es exactamente lo que necesitas cuando estás redactando papers, programando o simplemente concentrado.
Además, la estabilidad del sistema es tal que rara vez he necesitado reiniciar o solucionar problemas. Algo impensable si hubiese elegido Windows.
Rendimiento, estabilidad y compatibilidad en hardware Dell
Aunque muchas personas optan por usar elementary OS en portátiles más modestos, mi experiencia fue con un equipo robusto. El Dell Latitude 5520 que me proporcionó la universidad tenía potencia de sobra, pero eso también puede ser una trampa si el sistema operativo no sabe gestionarla.
Afortunadamente, elementary OS no solo reconoció todo el hardware desde el arranque (Wi-Fi, cámara, touchpad, teclado retroiluminado…), sino que también hizo uso eficiente de los recursos. A diferencia de otras distros más pesadas, Pantheon y sus aplicaciones no generaron cuello de botella ni consumo excesivo de RAM.
Es más, la batería me rendía más con elementary que con Windows 10. Y eso, para alguien que trabaja entre bibliotecas y laboratorios, es oro puro.
Lo bueno, lo malo y lo que nadie te cuenta de elementary OS
No todo es perfecto, claro. Hay cosas que debes saber antes de lanzarte:
Lo bueno:
- Interfaz espectacular y coherente.
- Ligero y rápido.
- Ideal para productividad sin distracciones.
- Excelente para equipos nuevos o antiguos.
- Perfecto para quienes odian Windows pero no quieren algo demasiado técnico.
Lo malo:
- Algunas aplicaciones están en inglés por defecto.
- La AppCenter tiene menos opciones que la tienda de Ubuntu.
- No es tan personalizable como otras distros como KDE.
- El modelo de «paga lo que quieras» puede ser confuso para nuevos usuarios.
Lo que nadie te cuenta:
- Puedes añadir repositorios de Ubuntu y tener acceso a todo su ecosistema.
- Hay formas de tunear Pantheon más de lo que parece, si te animas.
- La comunidad en Reddit y GitHub es de las más educadas y cooperativas.
¿Para quién es elementary OS y por qué deberías probarlo?
Elementary OS es, sin duda, una de las mejores puertas de entrada al mundo Linux para quien busca estética, productividad y libertad sin complicaciones. Es un sistema que no pretende ser todo para todos, pero lo que hace, lo hace excepcionalmente bien.
Lo recomendaría sin dudar a:
- Estudiantes universitarios y académicos.
- Creativos que vienen de macOS.
- Usuarios de Windows cansados del caos.
- Personas que valoran la belleza y la funcionalidad por igual.
Mi viaje con elementary OS ha sido más que una elección técnica: ha sido una experiencia que me permitió concentrarme en lo que realmente importa. Y eso, para mí, vale más que cualquier logo de manzana mordida o ventana azul.
Opinión Personal
Después de tantos años usando Windows casi por inercia, dar el salto a Linux fue una mezcla de miedo y curiosidad. Tenía claro que quería algo funcional, rápido y estéticamente agradable… pero sin caer en una maraña de comandos o configuraciones eternas.
Así fue como llegué a elementary OS, y la verdad, superó todas mis expectativas. Su diseño minimalista tipo macOS, el enfoque en la productividad sin distracciones, y la estabilidad que ofrece gracias a su base Ubuntu, me convencieron desde el día uno. En mi caso, lo instalé en un Dell Latitude con especificaciones bastante altas, y el rendimiento fue sencillamente impecable.
No voy a decir que sea perfecto. Le faltan algunas aplicaciones en su tienda, y no es la distro más flexible para tunear… pero precisamente ahí está su magia: funciona bien desde el principio, sin que tengas que romperte la cabeza.
Si estás considerando cambiar de sistema operativo, ya sea porque estás harto de Windows o quieres algo más fluido que Ubuntu, te recomiendo que le des una oportunidad a elementary OS. Puede que no sea para todos, pero si conectas con su filosofía, no vas a querer volver atrás.
👉 ¿Y tú, ya lo probaste?
Cuéntame tu experiencia con elementary OS o cualquier otra distro Linux. Me encantaría leerte en los comentarios. ¿Lo recomendarías? ¿Qué fue lo que más (o menos) te gustó?
